Hoy tenemos otro gran sueco interior – blanco como la nieve y acogedor. Casa de piedra restaurada de 1910, con un pequeño patio plantado de perales, geranios y plantas ornamentales. La casa está bañada por la luz: ¡más ventanas, menos paredes! La decoración interior es bastante lacónica y funcional, típica del diseño escandinavo. Simple pero de buen gusto!